LA COMUNIÓN DE BONO

Lo obispos han dejado claro que los diputados que hayan votado a favor de la Ley del Aborto han cometido un pecado mortal y público y que, público, ha de ser su arrepentimiento (Público, 27-11-2009).
Le han puesto en un compromiso a José Bono, Presidente de las Cortes, que a pesar de declararse cristiano practicante, los obispos le negarán la comunión por haber votado a favor de la referida ley.
Con acierto, su excelencia ha salido respondón (Público, 27-11-2009) y ha dicho a los reverendísimos pastores de la Iglesia que expliquen cómo es posible que le dieran de comulgar al asesino chileno Pinochez y a él le nieguen el sagrado sacramento por ser socialista y votar en consecuencia.
Añado yo, que no estaría de más que la Conferencia Episcopal explicara y pidiera perdón públicamente por lo de nuestro asesino particular, Franco, al que no sólo le administraban la comunión sino que le metían y sacaban de sagrado bajo palio como si fuera la mismísima custodia del sagrado pan ázimo.

D. José Bono Martínez, tenga cuidado porque, cuando vaya a tomar la hostia consagrada, quizás lo único que reciba sea... una hostia.
Claro que a mí plin; allá ustedes con sus enredos.